Este es uno de los mejores libros de ilustraciones de los Mitos de Cthulhu que he visto nunca, seguramente no hay demasiados pero esta joya de Fantasy Flight Games cuenta con unas ilustraciones que no dejan casi nada a la imaginación, siempre que dirigía partidas de La llamada de Cthulhu tenía este libro bien cerca para mostrar en una ilustración lo que no podía describir con palabras. Hoy os reseño la edición en castellano, publicada por Edge Entertainment ya hace unos añitos.
Son 192 páginas encuadernadas en cartoné con sobrecubiertas.
A muchos os sonarán estas ilustraciones de diferentes productos de FFG, desde el LCG de Cthulhu hasta Arkham Horror y demás juegos de su catalogo, ya que esto no es más que una recopilación de las mejores imágenes que tenían cuando salió el libro allá por 2006, me sorprende que aún no hayan sacado una segunda recopilación, yo la compraría con los ojos cerrados.
Aquí tenéis los créditos y el índice.
En el prólogo se nos explica como a pesar de las vagas descripciones que los autores dieron de la mayoría del bestiario de los Mitos de Cthulhu los ilustradores han conseguido plasmarlos y convertir estas imágenes en nuestro estándar a la hora de imaginarnos aquellas indescriptibles y amorfas aberraciones.
El primer capítulo se titula Conocimientos prohibidos y se centra en libros, rituales, invocaciones y demás peligros que acechan a cualquiera que acceda a sus secretos.
Incluyendo estas insondables estanterías repletas de peligrosos volúmenes.
A continuación un capítulo titulado Visitantes, donde contemplaremos con todo lujo de detalle la esencia de los Mitos de Cthulhu, criaturas como los Chthonian, el ángel descarnado de la noche, los shantak o el mismísimo horror de Dunwich pueblan estas páginas para poner a prueba nuestra cordura.
Los Migo, el ejercito de Yuggoth, en su lento tránsito hacia un destino desconocido.
El tercer capítulo se titula Ley y orden, y es el que más me hace pensar en una partida de La llamada de Cthulhu, hojeándolo descubriremos escenas que muchos hemos vivido en nuestras partidas: persecuciones, disparos, rostros impregnados de horror, etc.
Por ejemplo esta espectacular ilustración siempre me recuerda a una partida en la que la policía esposó a los investigadores a su coche mientras entraban a investigar la casa que acababan de allanar, desgraciadamente no habían acabado con la repugnante criatura que habitaba el sótano y conseguí ponerlos de los nervios mientras escuchaban impotentes los gritos de horror y los disparos desesperados de los policías.
Extraños pasatiempos nos lleva hasta la mente y las costumbres de las más extrañas criaturas: invocaciones, rituales y tremendos horrores que son imprudentemente llamados hasta nuestro plano de existencia.
En el quinto capítulo, titulado Las profundidades, viajaremos desde las calles de Innsmouth hasta...
... la misteriosa y no-euclidiana R'lyeh.
No podía faltar una sección dedicada a las Expediciones que tan características son de las grandes campañas de La llamada de Cthulhu, viajes hasta los lugares más remotos del planeta.
¿Adivináis a que lugar pertenece esta imagen? No es otra que la misteriosa y enigmática Meseta de Leng.
Los dos últimos capítulos están dedicados a dos entidades que también son protagonistas de la mayoría de las campañas que habréis dirigido o jugado, primero el Rey de Amarillo, tan de moda después de True Detective.
Y sin duda el más famoso de todos, El Caos Reptante: Nyarlathotep.
Guarda la última bala para ti, un sabio consejo perfectamente ilustrado en la siguiente imagen.
Y que mejor forma de cerrar esta foto-reseña que con una sublime imagen del mismísimo Azathoth.
Me he dado cuenta de que me he dejado llevar y solo he fotografiado las ilustraciones a doble página, pero no todo el libro es así, hay muchísimas ilustraciones más pequeñas, si queréis ver más imágenes os remito a la foto-reseña que hice de la edición en inglés hará unos cinco años: The Art of H.P. Lovecraft's Cthulhu Mythos. Insisto, uno de los mejores libros de ilustraciones de los Mitos de Cthulhu que existen.
Un libro estupendo. Dibujikos para todos!
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