Miskatonic School for Boys

Estoy tan obsesionado con Kickstarter que ya ni me leo lo que estoy comprando antes de meterme de cabeza, estaba convencido de que este Miskatonic School for Boys era una expansión del Miskatonic School for Girls (que recordemos tenemos en nuestro idioma, Miskatonic escuela para señoritas), y nada más lejos de la realidad. Estamos ante un juego independiente con identidad propia y que no tiene nada que ver con su predecesor más allá de su aspecto gráfico.

Este es un juego de deducción inversa, es decir, habrá roles ocultos y sabremos el de todos los demás jugadores, por lo tanto deberemos adivinar qué estudiante somos nosotros, un reto apasionante que me ha hecho pensar en un filler que adoro: Hanabi. Las partidas rondarán los tres cuartos de hora (aunque podemos jugar menos rondas) y es para entre tres y seis jugadores mayores de 10 años.

Empezaremos cada ronda cogiendo una tarjeta al azar que nos indicará nuestra identidad, la situaremos frente a nosotros (con unas peanas para que se aguanten de pie) con la peculiaridad de que serán los demás los que puedan verla, ese será nuestro estudiante durante la partida y deberemos averiguar de quién se trata. Para ello cada turno deberemos hacer una pregunta de SI/NO relacionada con las palabras que tenemos en estas fichas de personaje (por ejemplo: ¿Soy Ignorante?), esta pregunta se la haremos a cualquier jugador y este deberá contestarnos mirando nuestra ficha, lo divertido es que antes todos habremos cogido una carta que mantendremos en secreto y que nos indicará si somos sinceros o unos mentirosos compulsivos, si somos sinceros siempre tendremos que contestar la verdad, si somos mentirosos podremos decidir si contestamos la verdad o no, porque claro si no decimos la verdad el que nos está preguntando no se enterará, pero el resto de jugadores si. 

Esto va incrementando el nivel de paranoia durante la partida, vas descartando estudiantes que tienes clarísimo que no eres (cada jugador tiene un mazo con todos los estudiantes disponibles, para ir cotejando las respuestas), vas aprendiendo a quién puedes preguntar y a quien no, y puede que recuperes algún estudiante descartado al descubrir que lo has descartado después de una posible mentira... Incluso cada estudiante tiene una pregunta que no se le puede hacer nunca, una palabra prohibida por decirlo de alguna manera, por lo que cuando te preguntan por cualquier palabra ya podrás descartar algunos estudiantes que seguro que no eres, no solo es importante preguntar sino que también tendremos que estar atentos a las preguntas que nos hagan.

Se puede jugar hasta tres rondas y cada una de ellas consiste en averiguar quien eres lo antes posible, ya que el primero que se arriesga obtendrá más puntos que el segundo (si acierta, claro). Un muy buen filler que nos hará pasar buenos ratos. Cuando leí la primera vez las instrucciones pensé que lo limitaba la alta dependencia del idioma, luego caí en la cuenta de que da igual lo que signifique cada adjetivo, por lo que no hay dependencia del idioma más allá de la capacidad que tengamos cada uno para leer y entender las instrucciones.