20 de julio de 2018

A Lovecraft Retrospective (3/3)

A Lovecraft Retrospective (1ª parte), A Lovecraft Retrospective (2ª parte) y A Lovecraft Retrospective (3ª parte)

Aquí tenéis la tercera y última parte de A Lovecraft Retrospective, la antología publicada hace diez años por Centipede Press y que me ha servido para celebrar también el décimo aniversario de este blog. En esta ocasión os muestro la portada sin la sobrecubierta, aunque lamentablemente no se aprecia en absoluto lo más bonito, su relieve tentacular.


En la biografía de Allen Kozzowski nos explican algo parecido a lo que os comenté en la segunda parte de esta foto-reseña, los autores contemporáneos ya no beben directamente de la obra de H.P. Lovecraft como hacían los artistas de hace ochenta años, Allen por ejemplo se inspira en las viejas portadas de Astounding Stories para ilustrar a sus Yithianos.


A tal respecto hace unos años viví un caso muy ilustrativo, tengo un amigo cuya madre es dibujante profesional, nunca había leído a Lovecraft y un año para su cumpleaños mi amigo le regaló la Narrativa completa de Valdemar y le pidió que cuando se la leyera dibujara algunos cuadros con lo que le inspiraran los relatos, sin buscar referencias ni imágenes en Internet. El resultado fue fascinante, porque a pesar de que el estilo fue muy propio los bichos que dibujó me recordaron perfectamente a las criaturas a las que representaban, es decir que a pesar de que siempre se ha dicho que H.P. Lovecraft describió muy levemente a sus criaturas os aseguro que fue más que suficiente para alimentar la imaginación de infinidad de artistas, sin embargo hoy en día ya nos resulta imposible discernir quién es original y quién se inspira en sus predecesores.


El ilustrador inglés Les Edwards es de esos que ha aparecido en bastantes volúmenes de Chaosium, aunque leyendo este libro he descubierto que en muchos casos no se encargó una ilustración para una portada concreta sino que se tiró del portafolio de diversos artistas y se aprovecharon ilustraciones ya creadas, supongo que es más barato.


A Randy Broecker lo conozco de alguna colaboración suya con Neil Gaiman, no lo relacionaba para nada con los Mitos de Cthulhu y helo aquí.


A J.K. Potter sin embargo si que lo conocía relacionado con la obra de H.P. Lovecraft, es uno de esos fotógrafos cuyo trabajo me fascina, tiene un estilo parecido al de Dave McKean o, en menor medida, al del italiano Andrea Bonazzi, cuya magnífica obra veo por todas partes sin que en muchas ocasiones se haga referencia a él, una lástima, pero supongo que es uno de los gajes del oficio hoy en día.


De hecho a Potter lo conozco precisamente por esta ilustración que sirvió de portada de la revista Heavy Metal dedicada a H.P. Lovecraft.


Y para hablar del siguiente artista tengo que ponerme de rodillas: Tom Sullivan si que trabajó largo y tendido para Chaosium creando ilustraciones y arte interior para diversos manuales de Call of Cthulhu, de hecho algunas de las más míticas y recordadas son suyas.


Pero además de eso hay un par de detalles en su biografía que me fascinan: su primera toma de contacto con los Mitos de Cthulhu fue en 1977 cuando se vio implicado en una película titulada The Cry of Cthulhu que desafortunadamente nunca vio la luz, además Tom Sullivan fue el creador del Necronomicón que vemos en la saga de películas Evil Dead.


El siguiente artista es Dave Carson y es de esos que no me transmite gran cosa, aunque supongo que a estas alturas del libro, cuando llevo más de 300 páginas babeando, el nivel de exigencia lo tengo por las nubes.


Y alguien que se va a encargar de mantener por las nubes ese listón es John Coulthart, un ilustrador del que tengo alguna cosilla reseñada en el blog, como su The Haunter of the Dark.


En su web podéis ver muchas más ilustraciones, curiosamente yo lo conocí gracias a un calendario lovecraftiano que cayó en mis manos hace ya unos años.


Jeff Remmer sin embargo es uno de esos rara avis de los que no me suena el nombre a pesar de que tiene ilustraciones que he visto mil veces y que me flipan, este Yithiano no me suena, pero...


¿Qué me decís de este Ángel Descarnado de la Noche?


¿Y de este Antiguo? Son ilustraciones que aparecen de las primeras en Google Imagenes si buscas a estas criaturas lovecraftianas y eso hace que sean compartidas y utilizadas en blogs y webs hasta la saciedad, aunque como os digo a mi el nombre de su autor no me sonaba, un error que procuraré no volver a cometer porque sin duda merece tener un buen crédito por estas ilustraciones.


En el otro extremo tenemos a Goomi, nombre con el que se conoce popularmente a François Launet que no solo me suena sino al que tengo el placer de conocer en persona.


Es el autor de La cripta (del horror) innombrable y ha participado en diversas ilustraciones relacionadas sobre todo con la edición en francés de L'Appel de Cthulhu, y yo lo conocí hace muchos años en un Saló del Cómic.


Y entre tanto autor que conocía y que me fascina y tanto otro que no conocía y que no me transmite gran cosa también tenía que haber algún descubrimiento interesante, a este Gwabryel no lo conocía pero sus ilustraciones me parecen dignas de tener un póster o un cuadro en mi comedor.


Otro que me parece la mar de curioso es John Jude Palencar, que aunque sea palabras mayores casi me recuerda a Dalí tras una sobredosis de Hellraiser.


Posiblemente uno de los autores de este libro más laureados y reconocidos sea Bob Eggleton, sus magníficos paisajes e ilustraciones de Cthulhu no son una mala elección como colofón de esta brillante retrospectiva.


El libro se cierra con unas palabras del escritor Thomas Ligotti.


Y por último tenemos unas cuarenta páginas con reproducciones en miniatura de todas las ilustraciones que encontramos en el libro, explicándonos quién la dibujó, en que año y donde se utilizó originalmente.


Estas páginas vienen a completar de manera sublime un libro excelente, me he pasado literalmente horas repasando estas miniaturas.


En los créditos del libro podemos leer que hay una edición limitada y firmada de este libro, no quiero ni imaginarme, viendo el precio que tiene esta edición estándar, a cuanto debe venderse esa.


Y es que eso, el precio, es el único punto negativo que le encuentro a este libro. El hecho de que se vendiera originalmente por 400 dólares y de que hoy en día sea difícil conseguirlo por menos del doble hace que esto sea algo tan exclusivo como para no ser tenido en cuenta, yo por lo menos así me tomo las cosas tan caras, se de su existencia prácticamente desde que se publicó y he podido comprarlo ahora porque lo he encontrado de segunda mano a una cuarta parte de su valor original, a ese precio no me parece caro, ¿pero 400 dólares? Por ese precio no me compro ni el mismísimo Necronomicón.


Aparte del precio el único detalle que no me ha gustado de este libro es que viene en un estuche muy soso, es de agradecer que se incluya un estuche porque el libro es tan grande y pesa tanto que sin duda ayudará a su conservación, pero podían haber puesto algún detalle en su parte frontal o lomo, el título o unos tentáculos como en la cubierta del libro, así en negro es muy feillo.


Aquí veis los cuatro libros más grandes de mi colección, tenía que haber puesto alguno normal para que la comparación fuera más gráfica, pero bueno ya os puse las medidas en la primera parte de la reseña y con eso os podéis hacer una idea, no hay estantería en la que meterlos.


Espero que os haya gustado este repaso, tanto da si es por el libro en si o por el visionado de tanta y tan buena ilustración relacionada con los Mitos de Cthulhu, yo desde luego he disfrutado mucho escribiendo estas líneas y revisando sus páginas por enésima vez.

A Lovecraft Retrospective (1ª parte), A Lovecraft Retrospective (2ª parte) y A Lovecraft Retrospective (3ª parte)

1 comentario:

gorgo dijo...

Un libro muy guay. Los que ilustran los mitos son tan interesantes y (a veces) tan influyentes como los escritores. Una maravilla.