Don't Mess with Cthulhu

Don't Mess with Cthulhu es un juego de cartas de roles ocultos aparecido vía Kickstarter con el que me ha pasado una curiosa anécdota de superación personal y de prejuicios lúdicos superados, algo que hace unos días os expliqué que me había pasado con un juego de rol (Edén) y ahora me ha ocurrido con un juego de mesa, ¿cuantas cosas más me estaré perdiendo por no tener tiempo para todo?

Pueden jugar de 4 a 6 jugadores mayores de 14 años, las partidas rondarán los 20 minutos de duración y lo ha publicado la editorial Indie Board & Cards. El tema está en que a mi por lo general me encantan los juegos de mesa de rol oculto, máxime cuando son sencillos y de cartas, desde los más simples como Los hombres lobo de Castronegro hasta los que tienen algo más de chicha como La resistencia o Avalon son juegos de mesa que me han dado centenares de horas de risas y diversión, por eso este Don't Mess with Cthulhu lo esperaba con muchas ganas, pero cuando me llegó y me leí las instrucciones me dejó muy frío, tanto que lo dejé en la estantería sin intención de probarlo, me pareció que sus reglas eran vagas y que faltaba mecánica para que el juego fluyera satisfactoriamente, no me atrajo y me pareció que era un juego puramente de azar, sin demasiada gracia.

Y no podía estar más equivocado, hace unas semanas, habiendo olvidado ya este juego, me fui a pasar la tarde a Vía Lúdica y allí probando juegos llegó el momento en que nos dispusimos a jugar al Timebomb de Ediciones Primigenio, ¡menuda sorpresa! ¡La mecánica era idéntica a la de aquel Don't Mess with Cthulhu que tenía olvidado en casa! Y debo confesar que se me quedó cara de tonto al descubrir que era un juegazo, la única diferencia entre Timebomb y este es que allí son terroristas intentando hacer petar una bomba y agentes intentando evitarlo y aquí son sectarios intentando invocar a Cthulhu e investigadores intentando evitarlo, le mecánica del juego es la misma.

Al principio de las partidas se reparte en secreto una carta de rol oculto, los jugadores pueden ser sectarios o investigadores. A continuación se reparten una serie de cartas a cada jugador, entre estas cartas hay una de Cthulhu, tantas de Símbolo arcano como jugadores haya y todas las demás son cartas que no tienen ningún efecto, los sectarios deben lograr que se descubra la carta de Cthulhu durante la partida, y los investigadores deben lograr que se encuentren todos los Símbolos arcanos. Los jugadores deben decir cuantos Símbolos arcanos tienen en su mano (aunque no tienen porque decir la verdad) y a continuación barajarán las cartas y las situarán frente a si boca abajo, tal como podéis ver en la siguiente imagen, el jugador inicial tendrá una linterna que situará frente a una carta de otro jugador, dándole la vuelta y mostrando lo que hay en ella, si es Cthulhu ganan los sectarios, si es un Símbolo arcano se sitúa en el centro de la mesa (y cuando estén todos ganan los investigadores) y si la partida no ha finalizado el dueño de esa carta tendrá la linterna y deberá jugarla sobre la carta de algún otro investigador para revelarla y seguir con la partida.

Eso que me pareció azar absoluto, lo de ir colocando la linterna en cartas de otros jugadores, no lo es, que el juego funcione o no es responsabilidad total y absoluta de los jugadores, es de esos juegos en los que hay que entrar y con los que hay que implicarse, un juego sucio en el que mentiremos como bellacos y en el que a pesar de que no podremos creernos a nadie deberemos acabar confiando en unos u otros, cada cual tendrá su estrategia y todos intentaremos hacernos pasar por investigadores intentando desvelar a Cthulhu si somos sectarios o evitándolo a toda costa si efectivamente somos investigadores, es uno de esos juegos en el que rara es la partida que decepcione, un juego que te pone frenético y que vicia muchísimo, ya que las partidas son muy rápidas y trepidantes. Evidentemente os recomiendo encarecidamente este Don't Mess with Cthulhu, aunque si no lo encontráis o no os podéis hacer por él buscad el Timebomb, es lo mismo sin el ingrediente lovecraftiano pero lo podréis encontrar en cualquier tienda, ¡y merece mucho la pena si os gustan los juegos de rol oculto! Además tiene otra virtud que es muy atípica entre este tipo de juegos, funciona perfectamente a cuatro jugadores, otros que me encantan, como Avalon o La resistencia, se resienten mucho con un número de jugadores reducido, sin embargo este, como digo, funciona perfectamente.

PS: ¡Ah! Además a los que participamos en el Kickstarter nos regalaron un par de expansiones en las que se incluyen algunos añadidos al juego por si alguna vez lo aburrimos, nuevos retos y vueltas de tuerca, no las he probado pero os hablaré de ellas tan pronto lo haga.